La Adoración Nocturna es una asociación de creyentes que, reunidos en grupos se turnan velando en las horas de la noche para adorar a Dios en representación de toda la humanidad y en nombre de toda la Iglesia, y para agradecer al mismo Cristo, Dios y Hombre, su presencia en el Sacramento que los une al Sacrificio redentor.
La espiritualidad de la Adoración Nocturna trata de imitar a Cristo adorador del Padre, que durante su vida mortal oraba frecuentemente de noche, y que ahora perpetúa su adoración, su intercesión y su sacrificio redentor en la Eucaristía.
En nuestra parroquia de San Valentín y San Casimiro, nos reunimos para la Adoración Nocturna los terceros viernes de mes, a partir de las 20.15 horas.